El conflicto pesquero que mantiene paralizado al sector marítimo nacional sumará este lunes un nuevo capítulo con una nueva audiencia en la Secretaría de Trabajo tras el fallido intento de conciliación del jueves pasado. Empresarios y gremios, con fuerte representación marplatense, buscarán acercar posiciones luego de que la propuesta patronal de reducir un 30% de los salarios fuera rechazada de plano por las organizaciones sindicales.
La crisis afecta directamente al corazón de la industria pesquera, con la zafra del langostino completamente postergada desde el 17 de marzo. La flota de buques congeladores continúa amarrada y el impacto económico comienza a sentirse en toda la cadena productiva, desde los tripulantes hasta los astilleros, plantas de procesamiento y empresas logísticas.
En la última reunión, las cámaras empresarias –entre ellas CEPA, CAPIP y CAPECA– presentaron una propuesta que incluyó una rebaja del 30% en el ítem “sueldo proporcional por producción”, un esquema para que el salario básico quede absorbido por los ingresos generados durante la actividad a bordo, y cambios en el pago del aguinaldo y la compensación por incapacidad laboral temporal.
El Sindicato Marítimo de Pescadores (SIMAPE) y el Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU) se mantuvieron firmes y rechazaron cualquier tipo de retroceso en las condiciones laborales y salariales actuales, advirtiendo que los trabajadores ya enfrentan un fuerte deterioro en su poder adquisitivo producto de la inflación.
La audiencia terminó sin acuerdo y se estableció un cuarto intermedio hasta hoy a las 15 horas. La conciliación obligatoria fue prorrogada hasta el 6 de junio, fecha límite para alcanzar un consenso antes de que se liberen las partes y se abra la puerta a medidas de fuerza.
